Con el fin de impulsar la escritura en los estudiantes, para que cada uno experimente el poder de la misma, su relación con los conceptos, valores y sensaciones de los individuos, se ha propuesto un Concurso en el cual, a partir de una idea, una experiencia, un hecho, una visión o simplemente una palabra derramada del pensamiento, puedan construir un entramado lleno de vida y muchas ganas de decir.
De este modo, La Prensa de Santa Cruz publica los relatos cortos de ficción realizados por alumnos de la EPJA Secundaria 21, del espacio curricular Prácticas del Lenguaje V y VI, del ciclo lectivo 3ro “A”, “B” y “C” a cargo de los docentes César Luna y Walter Luna.
Los relatos cortos de ficción son un recurso literario de gran valor didáctico y educativo, a través de los cuales se transmiten símbolos, valores, roles y principios. Mediante la convocatoria de este certamen se pretende sensibilizar sobre la importancia de los temas abordados para el desarrollo integral de las personas y la erradicación de las desigualdades. La educación es el motor de transformación social hacia un mundo más justo e igualitario.
Los resultados de dicho Concurso superaron toda expectativa. No solo para quienes lo propusimos, sino para sus propios autores que, emocionados y asombrados con lo hecho comprendieron el valor incalculable de sus historias.
En los mismos encontrarán mujeres, hombres, familias, niños, valores, lugares, elementos, verdades, diversas texturas para un desenlace que jamás fue revelado. Historias que estremecen las venas de los lectores. Estudiantes comprometidos con sus estudios y decididos
YO TENGO UN SUEÑO: POR ANALIA SILVIA PEREYRA 3ro B
Mi sueño es tener mi casa propia, porque me separé hace 3 años y estoy viviendo con mi papá, lo único que quiero es tener lo mío para dejar de andar molestando, él me dice que no soy una molestia, pero no es lo mismo, Quiero tener lo mío propio.
Yo trabajo, pero con el sueldo que tengo no me alcanza para lograrlo, pero no pierdo la esperanza así que mi sueño sigue en pie. Espero que el año que viene pueda realizarla y poder llevarme a mi hijo a vivir conmigo.
El terreno es de 25×10 y tengo bastante patio para poder plantar árboles frutales y hacerme una quinta que tanto me gusta.
Lo lindo de esto que mi perrito va a tener un patio por poder andar y disfrutar, mi dulce hogar estará compuesto por 2 habitaciones, cocina, comedor y baño. A futuro quiero hacerme un quincho para poder disfrutar con mis hijos unos ricos asados.
El día que mi sueño se haga realidad voy a ser la mujer más feliz de este planeta. Ojalá que no pase más tiempo y se me pueda concretar. Sería muy bello tener mis cosas, porque en mi propio lugar puedo hacer lo que yo quiera y no tengo que andar pidiendo permiso para nada sería lo mejor que me podría pasar.
Después de concretar este anhelo me dedicaría a disfrutar la vida, salir de vacaciones a donde sea, sabiendo que no tengo que estar ayudando a pagar las cosas de otra persona sino lo mío y de nadie más.
Sería lo más justo que yo sola me sacrifique para tener mi techo donde vivir. Eso sí, estoy agradecida de mi papá que me está ayudando con dejarme quedar con él, por lo menos no pago alquiler, pero igual tengo que ayudar con la comida y los impuestos.
Lo único seguro de todo esto es que tengo mi trabajo y me siento más tranquila porque puedo comprar las cosas que a mí me gustan tener.
Eso siempre me enseñó mi padre y mi madre que uno se tiene que hacer de abajo para poder tener lo suyo y no andar dependiendo de nadie y menos de un hombre. Por eso no pierdo la esperanza y de poder cumplir mi gran sueño.