El homenaje que se le tributó en la tarde de este martes en Caleta Olivia al santo patrono de la Patagonia, trasuntó por una caminata protagonizada por cientos de fieles católicos desde la Plaza 20 de Noviembre hasta el Instituto Spínola, haciendo en breve alto en la plazoleta del Gorosito.
Se constituyó en una bulliciosa manifestación de alegría y numerosos niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos que se nuclean en diferentes parroquias y capillas, lucieron sombreros artesanales de vistosos colores y otra indumentaria festiva.
Además, portaron pancartas que identificaban a los grupos, pequeños carteles con frases de aliento y agradecimientos e incluso hasta los bombos y redoblantes se incorporaron a este tipo de eventos religiosos.
El obispo de la diócesis de Río Gallegos, monseñor Jorge García Cuerva, junto a los párrocos locales, acompañó el multitudinario festejo popular que no se realizaba a pie desde hace dos años en prevención a la pandemia del Coronavirus.
Vale recordar que Don Bosco, como se lo denomina habitualmente, nació en Turín (Italia) el 16 de agosto de 1815 con el nombre de Giovanni Melchiorre Bosco , es decir que hoy se cumplieron 207 años y es una de las figuras más veneradas de la Iglesia Católica que fuera canonizadas en 1934 por el Papa XI.
Además de ser un sacerdote, fue escritor y educador, fundó varias instituciones que persistieron en el tiempo y se proyectaron a nuestra región, como ser la Congregación Salesiana, el Oratorio Salesiano y la Asociación de María Auxiliadora, habiendo dedicado gran parte de su vida pastoral a los niños, niñas y jóvenes.
En ese marco de júbilo, el obispo de la diócesis que comprende a Santa Cruz y Tierra del Fuego, resaltó uno de los principales mensajes que transmitió Don Bosco a sus discípulos, cual fue el de ayudar a los jóvenes sobre todo a aquellos que sufren pobreza, falta de educación y otras dificultades que se van sucediendo en diferentes épocas, como hoy es el caso de la drogadicción.
“El desafío que tenemos por delante –afirmó- es enorme y debemos recordar que Don Bosco quería que los salesianos tuvieran una gran presencia en la Patagonia y cumplieran con una abnegada misión evangelizadora”.