Es la primera mujer que se hace cargo de una repartición de la fuerza de seguridad naval en la región patagónica y solo existen dos antecedentes el país, Luján y Escobar.
Por méritos propios, Giselle Soledad Córdoba, fue puesta en funciones a mediodía de este miércoles por el jefe la Prefectura de Comodoro Rivadavia, prefecto mayor Sergio Cernada.
Fue en el marco de una ceremonia que tuvo lugar en la plaza de armas, con una formación de efectivos y la participación de numerosas autoridades del ámbito político, judicial, portuario y de empresariado vinculado a actividades marítimas.
Entre los invitados se encontraba el intendente Fernando Cotillo; la jueza federal Marta Yáñez; la diputada por pueblo Liliana Toro y la segunda jefa de Dirección Zona Norte de la Policía de Santa Cruz, comisario inspector Elizabeth Calderón.
Tiene 41 años, está casada con un oficial retirado de la misma fuerza de seguridad y es madre de un chico de 13 años. Además, proviene de familia prefecturiana ya que su padre fue suboficial que se jubiló con el grado de ayudante de primera.
Nació en Capital Federal y formó parte del primer grupo de mujeres que ingresó a la escuela de cadetes, habiendo egresado en 2003 y su primera función en tareas operativas, con el grado de oficial ayudante, la cumplió en el puerto de Buenos Aires.
Tras ello se capacitó en la Escuela Superior de Oficiales de la institución realizando un curso de comunicaciones informáticas y más tarde se incorporó a la División Control de la Navegación y Registro Portuario, siendo su último destino la ciudad de La Plata, donde integró a la Sección de Control de Buques.
